Gracias a su conocimiento sobre el funcionamiento de la combustión interna de los motores, detectar para qué sirve cada pieza, desmontar, cambiar refacciones y dejarlo bien, hoy por hoy los mecánicos son un engrane fundamental para el movimiento de la ciudad.
En México, el Día del Mecánico se celebra el 24 de febrero, así como en otros países como Argentina, Uruguay, Ecuador y Venezuela. Se trata de una fecha que reconoce a aquellos que trabajan para mantener en buen estado a millones de vehículos.
Y es que dicho oficio tiene grandes responsabilidades, porque supervisan que los automotores-instalaciones, equipos, instrumentos y herramientas estén en buen estado para proteger la integridad física de los seres humanos que dependen y consumen su trabajo.
Un mecánico profesional debe tener siempre presente la enorme carga que adquiere cuando repara un auto, pues una reparación mal hecha en el sistema de frenos puede provocar un choque, y con ello daños. O, por otro lado, no verificar que una manguera del sistema del combustible esté mal conectada y con ello provocar un incendio; o dejar un cable expuesto y provocar un corto circuito.
Además, el mecánico se distingue por contar con una ética profesional que lo lleve a guiarse por valores como la honestidad, la responsabilidad, la solidaridad y el respeto, por mencionar algunos.
Con todas estas capacidades y habilidades reunidas en una persona, los talleres podrán enfrentar de mejor forma a un cliente cada vez más exigente y a unos competidores cada vez más agresivos.
Las aplicaciones de celular y una nueva relación de amor entre los mecánicos
Las nuevas necesidades de los consumidores impulsan la búsqueda de atenderlos de manera más rápida. Por eso, muchos mecánicos se esfuerzan día a día para tener siempre todas las herramientas necesarias y a cumplir.
Con los avances en la tecnología, la nueva caja de herramientas está en el celular. Gracias a este dispositivo y sus aplicaciones, los trabajadores de talleres automotrices pueden encontrar refacciones y mucho más en un tiempo mucho menor. Ya no hay que gastar tiempo valioso.