Las mismas vibraciones son generadas por el desalineamiento del yugo, el desgaste de las travesías, la flexión del tubo o el desgaste de las bridas de la corona, y finalmente por el desgaste del propio eje.
La reparación de los árboles de transmisión longitudinales se centra normalmente en la sustitución de los componentes como son las juntas cardán, los discos flectores o los fuelles guardapolvos que puedan proteger las articulaciones.
En caso de fisuras, abolladuras o rotura del árbol se debe sustituir por completo.
El diagnóstico de averías se hace comprobando visualmente los elementos desde la parte baja del vehículo. Para ver las holguras, se debe marcar con una línea todos los elementos. Esto es muy importante, ya que su mal acomodo puede ocasionar nuevamente vibraciones, puesto que alteran crucialmente su equilibrio.
Es valioso considerar que estas vibraciones pueden causar otros daños al vehículo, por ejemplo: las vibraciones aflojan las orugas y los cojinetes del vehículo, causan abolladuras y sellan la caja de cambios y los piñones del diferencial, por otro lado, en casos muy graves, el capó de la caja de cambios o del motor puede romperse.
El plan de acción
Todos estos signos se pueden deber a una cruceta de la junta cardán deteriorada, impactos en los bajos del vehículo, rodamientos en mal estado, flectores dañados o la pérdida de apriete de los tornillos de anclaje del flector de la transmisión con la caja de cambios o el diferencial.
Para esta última, se recomienda utilizar un fijador de alta resistencia para instalar los pernos de acople; además, este producto rellena holguras en las zonas de unión, las sella y evita el desgaste por movimientos y vibraciones.
No obstante, antes de emplearlo, es recomendable desengrasar, limpiar y secar todas las roscas. Cuando la temperatura de aplicación sea inferior a 5 °C, es aconsejable preparar la superficie de unión aplicando un tratamiento previo con un activador que acelere el curado. A continuación, se aplica el fijador de alta resistencia y se fijan los pernos con el par de apriete recomendado por el fabricante.
Este producto también es viable en todo tipo de uniones permanentes que no requieran de desmontaje. Asimismo, gracias a su resistencia a temperaturas extremas (entre -55º y +180 °C), a su larga duración de sellado y a la protección frente a la corrosión que concede a las zonas selladas, explica la firma, es un producto muy versátil y aconsejado para el profesional del taller.
Un programa de manejo preventivo podría incluir:
Lubricación periódica de los travesaños, soportes y toboganes.
Compra de nuevos componentes por un período de tiempo más largo.
Evite remolcar un vehículo detenido mientras está cargado.
Después de reparar o reemplazar el elemento cardán, es mejor que lo equilibre.
Si se observan síntomas de avería en el cardán, posiblemente también se cambie la caja de cambios, la suspensión y los cojinetes de las ruedas.